Con el calor del verano en pleno apogeo, ¿se ha asegurado de que un electricista certificado o un contratista inspeccione su piscina este último año?
Si no lo ha hecho, es una idea segura hacerlo enseguida.
Los peligros eléctricos ocultos dentro y alrededor de las piscinas, así como jacuzzis y tinas de hidromasaje, no deben ignorarse, afirma Andrew S. Martinez, vicepresidente de Protección, Seguridad y Flexibilidad Empresarial de Southern California Edison.
Un recordatorio de esto ocurrió recientemente cuando cuatro personas, incluyendo dos niños, fueron hospitalizadas después de sufrir una descarga eléctrica en una piscina en Palm Desert. Según datos de la Comisión para la Seguridad de los Productos de Consumo, desde 2002 se han registrado al menos 21 electrocuciones en piscinas,.
Las fallas en las luces y el cableado, especialmente en las piscinas más antiguas, suelen considerarse los peligros eléctricos más significativos.
“Las inspecciones anuales son la mejor solución a la hora de evitar estos peligros”, dijo Martinez. “Pero es importante destacar que los únicos que deben llevar a cabo a cabo estas inspecciones son los electricistas certificados o contratistas de piscinas, quienes no sólo se asegurarán de que su sistema esté correctamente conectado a tierra, sino que también inspeccionarán sus luces, cableado y cajas de conexión para verificar que estén instalados de forma correcta y segura. Esta inspección jamás debe quedar a cargo del propietario de la piscina o del personal de limpieza”.
Los profesionales certificados también realizarán actualizaciones para cumplir los códigos locales aplicables y el Código Eléctrico Nacional.
A fin de proteger aún más a los nadadores contra posibles descargas eléctricas, es recomendable instalar interruptores del circuito con descarga a tierra (en inglés, Ground Fault Circuit Interrupters o sus siglas GFCI) no sólo en todos los equipos eléctricos de la piscina sino también en todas las tomas eléctricas ubicadas a una distancia de 20 pies del borde del agua. Los cables eléctricos también deben mantenerse al menos a cinco pies de distancia de piscinas, jacuzzis y tinas de hidromasaje. De hecho, Martinez recomienda enérgicamente el uso de aparatos y dispositivos que funcionen con pilas en vez de cables enchufados.
Además, los socorristas en emergencias similares a la de Palm Desert deben asegurarse de interrumpir la corriente antes de entrar al agua o tocar un elemento conductor. Sin embargo, las medidas de emergencia no terminan aquí.
“Los propietarios de piscinas siempre deben tener un plan de emergencia a la vista de quienes la usan además de un gancho de pastor (en inglés, Shepherd’s crook) de fibra de vidrio para sacar a cualquier víctima de la piscina”, dijo Martinez. “Los interruptores de electricidad también deben estar claramente señalados con una etiqueta de forma que puedan apagarse rápidamente ante una emergencia”.
La prevención, sin embargo, puede ayudar a evitar este tipo de emergencias.
“Los accidentes eléctricos que ocurren en piscinas, jacuzzis y tinas de hidromasaje pueden prevenirse fácilmente”, agregó Martinez. “Pero los propietarios de piscinas deben contratar los servicios de profesionales certificados y seguir los códigos eléctricos para asegurarse esta prevención”.